miércoles, 5 de agosto de 2009

Hasta que llegaste tú ...

Siempre tuve alergia
a la conexión del sentimiento
era adicta a la firmeza de la tierra ,
no dejaba lugar para el burdel de las emociones
porque a la larga se cae en la adicción
de la sensación tremolina y loca
de querer quedarse en la existencia ajena .

Mi presión sanguinea no tenia altibajos
ni una sola ¡ lo juro por ésta ! ,
corrian por mis venas las antártidas quietas
deslizándose armoniosas y correctas ;
odiaba ser de la turba pasionaria
que se rasgaba la carne en los ardides del alma .

Hasta que llegaste tú
¡tú !
¡ miserable , dulcísimo canalla ! ,
y rompiste los pilares del planeta
tumbándome en los fangales de tu escencia
mojándo con tus mares continente ;
la pasiva sequedad de mis vivencias .

Llenaste mis motivos con tu sangre
compilaste en tu éter mis estelas ,
redacté de nuevo mil esquemas
cambiando con tu ser cada una de ellas ;
y desborde en impaciencia actitudes
permitiendo que la vida sedujera
mi ocaso ya cautivo en plenitudes .

Pero llegaste tú
¡tú !
¡ladrón de amores y de calma !
justo en el cadalso de mi dicha ;
asesino de mis soledades sin romanza
detractor , mi angel delicioso ,
influyes las rebeliones de mis ganas
que se escurren en protesta escandalosa
manifestando tu verdad bajo mi falda .

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